La evolución surge de la adaptación a los cambios que la Vida nos presenta. El Covid-19 es uno de los mayores a los que, como Humanidad, nos hemos enfrentado desde hace décadas. Tarazaga Emotional Business Management se encontraba inmersa en un cambio de identidad corporativa y definición estratégica del negocio, como tantas otras empresas, cuando la pandemia ha llegado. La supervivencia es de todas y todos los que, frente a los desafíos, mantenemos nuestro objetivo de contribuir al progreso de la sociedad a la que pertenecemos.
El delfín nos acompaña como logotipo desde hace 20 años, representa la mente emocional, valiente y social, señal de identidad de nuestro trabajo como empresa consultora. El creador de la marca original, el artista bilbaíno Mario Gaztelu, ha rediseñado sus trazos para lograr una imagen más dinámica y policromada, que incorpora conceptos clave en nuestra estrategia de negocio: digitalización, integración, agilidad y evolución.
Se integra perfectamente en la nueva web que ha diseñado Alfredo Álvarez, de Alalpe, donde se explica nuestra trayectoria corporativa junto a nuestra actual estrategia de negocio, mirando a la digitalización y a la inteligencia artificial como herramientas de un trabajo cien por cien humanista.
Orgullosos de nuestros valores
Con esta nueva imagen, Tarazaga se mantiene fiel a los principios con los que nació la consultora estratégica en 1998: honestidad, excelencia, confianza, innovación, adaptabilidad, entrega, solidaridad; y con los que desde 2005 entrena a los directivos y directivas de las empresas clientes: liderazgo participativo, colaboración, respeto, escucha y comunicación, atención eficiente y consciencia corporativa.
Nuestra nueva identidad corporativa es ahora más dinámica, flexible y polivalente. Está formada por la integración superpuesta de formas orgánicas, evocando la actividad celular, el origen de la vida y, con ellas la inteligencia emocional consciente que nos dirige constantemente hacia adelante.
Es un delfín que salta fuera del agua lleno de vitalidad y lucidez, para adentrarse de nuevo en el silencio pacífico de las aguas profundas, donde se recarga de fuerza y sabiduría. Surca, siempre en comunidad, los mares, dejando a su paso una estela de gratitud de todos aquellos con los que se encuentra. El delfín es jovial y solidario, audaz y generoso, ágil y fuerte, capaz de imprimir una duradera huella.
Autoconocimiento y empatía
Sus colores evocan la calidez de la piel humana, la cercanía, la amabilidad, el respeto y la colaboración, como principio y fin de los proyectos que acometemos. Este aspecto se ha querido reforzar con el uso de una tipografía técnica y legible, de trazos ligeros y precisos, con las aristas limadas, representando el autoconocimiento y la continua mejora de nuestra naturaleza humana para que manifieste todo su potencial.
El delfín pertenece a una familia biológica que cuenta con más de 30 especies, lo que da cuenta de su diversidad y capacidad de adaptación a diferentes entornos. La evolución les dotó de una fisionomía hidrodinámica, óptima para desenvolverse en un medio a menudo hostil. Son considerados una de las especies más inteligentes del planeta y se ha observado su capacidad para establecer vínculos sociales y para desarrollar una fuerte empatía.
Estamos agradecidos de los 20 años de travesía en los que ha sido un protector fiel en todo tipo de mares. Hoy lo celebramos devolviéndole la imagen que nos inspira, más vital y poderosa que nunca.